Mientras Israel ordena a más de un millón de personas evacuar el norte de Gaza en medio de una escalada sin precedentes, un trabajador de Islamic Relief relata la terrible situación en la que se encuentran en un último blog antes de que se cortase la conexión a Internet.
“Los días en Gaza comienzan con el sonido de la artillería. Los buques de guerra en el mar atacan la playa y las zonas circundantes, mientras que el este y el norte de la Franja de Gaza son atacados desde tierra. A veces se producen varios disparos a la vez y se oyen 4 o 5 explosiones enormes seguidas.
“Hoy pude escuchar el canto de los pájaros junto con el sonido de la artillería y pensé en cómo la vida y la muerte a menudo parecen ir de la mano en mi país.
“Empezamos a dormir en el centro de la casa, un lugar un poco más seguro, alejado de las ventanas. En los primeros días de la escalada los niños amanecían asustados, por eso ahora dormimos todos juntos; yo, mi esposa, mis hijos y el gato, si no se esconde. A veces me despierto, miro a mis hijos durmiendo plácidamente y pienso: “Lo siento, queridos, tenéis que crecer en este lugar. Es un mundo injusto«.
“Comenzamos a pensar en cómo asegurar lo esencial: agua y electricidad. Normalmente el agua llega a los hogares a través de camiones cisterna que la bombean a los tanques que tenemos en los tejados. Pero ahora los camiones cisterna no pueden llegar a la fuente en las afueras de la ciudad para repostar. El bombardeo nunca cesa, es demasiado peligroso. El único agua disponible por el momento es agua embotellada. Es una opción cara incluso en momentos de estabilidad, pero hoy el precio se ha duplicado. Para la electricidad, tengo una batería en casa conectada a luces LED. Es un sistema que ya utilizamos en Gaza, donde hemos tenido que adaptarnos a frecuentes cortes de electricidad. Pero ahora no podemos cargar las baterías. Nuestros teléfonos y bancos de energía pronto se apagarán. Seremos aislados del mundo. Cada vecindario tiene un generador de respaldo, pero pronto también dejarán de funcionar porque se están quedando sin combustible.
Este podría ser mi último blog; he oído que Internet se cerrará pronto”.