Nuestro Informe Anual 2020 marca 36 años de crecimiento continuo de una de las organizaciones benéficas y de desarrollo más grandes del mundo, al mismo tiempo que nos enfrentamos a los retos de la pandemia del Covid-19.
“Durante un año marcado por inmensos retos, nos mantuvimos firmes del lado de los millones de personas más vulnerables del mundo”, dice Waseem Ahmad, nuestro Director Ejecutivo. “Con fe y esperanza, Islamic Relief continúa haciendo todo lo que está en sus manos para asegurar un mundo seguro y justo para todos, sin importar los retos a los que nos enfrentemos.”
Empleando casi 69 millones de euros en la implementación de 370 proyectos de emergencia en 2020, respondimos con rapidez y eficacia a algunas de las crisis más devastadoras del mundo.
Adaptando de forma rápida nuestras operaciones a la pandemia, continuamos asistiendo a las familias que sufrían debido a los conflictos y desastres naturales y protegimos a millones de personas en 26 países antes de las devastadoras consecuencias del coronavirus.
“Islamic Relief nos dio la oportunidad de formar parte de la respuesta de emergencia y nos permitió proporcionar alivio a las familias más afectadas por el Covid-19”, dice Miriam Gaisar, voluntaria de Islamic Relief que vive en Madrid, España.
“No hay palabras que puedan describir cómo me siento sabiendo que, apoyando a Islamic Relief, he pedido llegar a alguien que lo necesita en algún lugar del mundo. Es un sentimiento que siempre albergaré en mi corazón.”
Islamic Relief también trabajó la resiliencia comunitaria ayudando a más de 127.000 personas a protegerse mejor cuando ocurre un desastre.
En Yemen llegamos a 3,6 millones de personas a través de tratamientos contra la desnutrición, el apoyo a los centros de salud y las distribuciones de alimentos, siendo el principal colaborador del Programa Mundial de Alimentos. En Siria ayudamos a 1,25 millones de personas a tener un mejor acceso a la sanidad, alimentos básicos y productos de supervivencia para el invierno.
En línea con nuestra estrategia, invertimos más en programas de desarrollo – iniciativas a largo plazo cuyo objetivo es reconstruir vidas y sacar a las comunidades de la pobreza. Invertimos 65 millones de euros en la implementación de proyectos vitales, como uno en Irak que ayudó a las comunidades cristianas yazidíes a reconstruir sus medios de vida destruidos por la violencia.
«Reavivó mi espíritu», dice Munisa, a quien entrenamos como defensora de la paz juvenil en Filipinas. «Me hizo pensar que Allah tiene un plan para mí … que tengo un papel que desempeñar en la construcción de la paz». Nuestro importante programa de paz, financiado por el departamento de ayuda del gobierno sueco, Sida, puso a las mujeres y los jóvenes en el centro de la consolidación de la paz local en varios países.
Adicionalmente, proporcionamos acceso a la educación a 180.000 niños y adultos, y ayudamos a que 735.000 personas pudieran tener ingresos estables.
Dimos acceso a suministros de agua, saneamiento e higiene a 692.000 personas y ayudamos a 72.000 niños huérfanos a través de nuestro programa de apadrinamiento.
Islamic Relief continuó haciendo incidencia sobre los problemas sociales del mundo, empleando casi 2 millones de euros en hacer presión por la justicia social.
Nuestras campañas pusieron la emergencia climática a un lugar destacado, enfatizando la necesidad de reducir las emisiones nocivas e invertir más en ayudar a las comunidades pobres a adaptarse al calentamiento global. Nuestra propia inversión en esta área fue de casi 32 millones de euros en proyectos que dieron respuesta a la emergencia climática en 19 países.
También destacamos la difícil situación de los jóvenes en Gaza y Nepal, afectados por la pobreza, a través de la publicación de informes contundentes, e hicimos campaña en 13 países para resaltar y abordar la violencia de género.
Ofrecimos ayuda vital a aquellas personas que se vieron forzadas a huir de sus hogares en busca de la seguridad. Al mismo tiempo que proporcionamos apoyo vital y práctico a las personas desplazadas de sus hogares, en 2020 Islamic Relief se aseguró de que los responsables de la toma de decisiones escucharan las voces de los refugiados como forma de influir positivamente en el cambio.
También ayudamos en la lucha contra el tráfico infantil y la explotación, ayudando a los niños más vulnerables del mundo.
2020 también fue un año crucial para nuestras reformas de gobernanza, las cuales se han estado llevando a cabo desde hace 6 años.
Ahora tenemos una Junta de Fideicomisarios (Trustees) más grande que se elige a través de una Asamblea General Internacional recientemente establecida cuyos miembros incluyen representantes de nuestras oficinas de los 5 continentes.
Queremos agradecer a los donantes por su continuo apoyo, y por donar generosamente más que nunca pese a los retos económicos a los que muchas personas se han enfrentado.
Lee más sobre cómo tu ayuda ha marcado la diferencia para millones de personas vulnerables en todo el mundo en nuestro Informe Anual de 2020.