Tras el estallido de la violencia en Myanmar en 2017, unos 745.000 hombres, mujeres y niños rohingya huyeron al país vecino, Bangladés.
Viviendo en campos de refugiados en Cox’s Bazar, están luchando para hacer frente a la vida diaria con pocos ingresos, o ninguno.
Y por eso vuestra ayuda es tan crucial para personas como Sufia.
A sus 59 años, vive en un campo de refugiados de Cox’s Bazar con sus dos nietos tras huir de Myanmar para salvar sus vidas.
Foto: De camino a casa de Sufia con su paquete de comida.
Gracias a Dios, Sufia y sus nietos están a salvo en Bangladés.
Sin embargo, vivir en un campo de refugiados también conlleva sus propias dificultades:
«Desde el principio, tuve dificultades para conseguir alimentos y otros artículos de primera necesidad. Me llevaron a un campamento… y ahora recibo 30 kg de arroz, lentejas y aceite como ración mensual del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas.
«Esto satisface nuestras necesidades básicas. Sin embargo, necesitamos artículos adicionales para el Ramadán y el Eid». (Sufia)
Desde su llegada al campamento, la familia ha luchado por encontrar suficiente comida para alimentarse.
Viven en una pequeña habitación y comparten el baño y el agua con otras familias rohingya del campamento. Carecen de la intimidad y los servicios sanitarios del campamento son mínimos.
Por supuesto, durante Ramadán, la familia también estaba preocupada por cómo romper el ayuno:
«Intentamos hacer comidas regulares (iftar y suhoor) durante el Ramadán, pero necesitamos ayuda adicional para el iftar, el suhoor y el Eid.
«… Estamos muy preocupados por la pandemia. No hay forma de ganar más dinero para poder comprar más comida para mantenernos. … Necesitamos ayuda adicional para el mes sagrado del Ramadán… Hemos cambiado nuestros hábitos alimentarios y hemos empezado a comer menos….
«Durante el Ramadán, no podemos comer como solíamos hacerlo en Myanmar. No podemos permitirnos comprar… [los artículos que queremos] en el mercado local».
Alabado sea Dios, gracias a vuestra ayuda, Sufia y su familia pudieron disfrutar de un paquete de alimentos de Ramadán este año y no tuvieron que preocuparse por la comida:
«Este paquete de alimentos del Ramadán nos ayuda a cubrir nuestras necesidades. Estamos muy contentos de recibir estos artículos.
«Gracias a Dios, hemos recibido un paquete para Ramadán y podremos afrontar todo el mes con estos productos. No tenemos que preocuparnos por la comida y podemos concentrarnos más en las oraciones.
«Mi comunidad y yo estamos felices de recibir estos paquetes de alimentos. Son una gran ayuda para todos nosotros».
Cada paquete de Ramadán contenía productos esenciales como arroz, aceite, lentejas, guisantes, azúcar, dátiles, pasta y carne, lo que permitió a Sufia y a su familia disfrutar de este sagrado mes.
Foto: Una familia en Cox’s Bazar con su paquete de alimentos
Gracias por vuestro continuo apoyo, ayudando a Sufia y a miles de personas más como ella.
De hecho, durante el Ramadán de 2021, vuestras generosas donaciones nos permitieron proporcionar ayuda alimentaria a más de un millón de personas en más de 30 países de todo el mundo.
Vuestro apoyo, como siempre, es crucial.
Gracias. Estáis salvando vidas.