Las repetidas órdenes de Israel a los civiles para que se desplacen en Gaza son inhumanas y causan un gran sufrimiento humano, comenta Islamic Relief. Pacientes enfermos y heridos, personas mayores, niños y personas desnutridas y personas con discapacidades graves se encuentran entre los miles a quienes se les ha ordenado mudarse nuevamente en los últimos 10 días. No tienen ningún lugar seguro adonde ir, y el constante desplazamiento está empujando a más personas a la hambruna y haciendo que los brotes de cólera sean cada vez más probables.
Miles de personas están huyendo aterrorizadas después de que Israel ordenara a la gente que abandonara partes de la ciudad de Gaza en las últimas 48 horas, obligándolas a dejar los refugios escolares y cerrando hospitales debido a los bombardeos sin descanso. La semana pasada, Israel ordenó que unas 250.000 personas abandonaran Jan Yunis, en el sur de Gaza, la mayoría de las cuales viven ahora en condiciones desesperadas.
El ejército israelí ha ordenado a los civiles que se trasladen a las llamadas “zonas seguras”, pero no hay ningún lugar seguro en Gaza donde varias personas, incluidas niños, han muerto en ataques poco después de llegar a estas zonas. Las personas corren un peligro mortal ya sea que se queden o huyan, y se nos informó que decenas de personas murieron hoy en otro bombardeo contra una escuela que albergaba a familias desplazadas en Jan Yunis.
Muchas de las personas a las que se les ordenó trasladarse han sido desplazadas varias veces: primero se les ordenó abandonar sus hogares y trasladarse a Rafah, luego se les ordenó abandonar Rafah y trasladarse a zonas como Khan Younis, y ahora, apenas unas semanas después, se les ha ordenado moverse una vez más.
El último desplazamiento masivo se produce mientras un nuevo informe de expertos independientes de la ONU advierte que la hambruna se ha extendido desde el norte de Gaza a partes del centro y el sur, mientras Israel continúa restringiendo severamente e impediendo la ayuda humanitaria.
El personal de Islamic Relief y sus socios informan que muchas de las personas más vulnerables se encuentran entre aquellas a las que se les ha ordenado desplazarse, entre ellos niños hambrientos, personas en sillas de ruedas, pacientes hospitalizados y ancianos, obligados a huir a pie y a caminar muchos kilómetros en medio de la noche para evitar el sol abrasador durante el día. Algunas personas están siendo empujadas por la calle en camas de hospital, ya que los hospitales han tenido que evacuar a cientos de pacientes que están demasiado enfermos para mantenerse en pie.
Cada vez que las personas tienen que desplazarse se vuelven más vulnerables a la hambruna y a las enfermedades. Alrededor del 1,9 millones de personas –el 80% de toda la población de Gaza– están ahora atrapadas en zonas cada vez más reducidas de Gaza, donde la crisis humanitaria se vuelve cada día más desesperada. Muchas familias comparten tiendas de campaña o duermen al aire libre o en las estructuras de edificios dañados que podrían colapsar en cualquier momento. Hay poca comida, falta de agua potable y condiciones sanitarias extremadamente deficientes. El personal de Islamic Relief describe montones de basura y corrientes de aguas residuales fuera de las tiendas de campaña donde la gente tiene que caminar entre las aguas residuales para acceder a los alimentos. Hay muy pocos baños, por lo que mujeres, niñas, niños y hombres tienen que compartirlos, lo que no les da privacidad y aumenta los riesgos para mujeres y niñas.
Las terribles condiciones han provocado un aumento de enfermedades como la hepatitis A y la diarrea aguda en las últimas semanas y la amenaza de brotes mortales de cólera está aumentando. Las temperaturas son cada vez más altas durante el verano, lo que aumenta aún más la probabilidad de que las enfermedades se propaguen.
Islamic Relief continúa brindando ayuda diaria a las personas desplazadas, incluido la distribución de comidas cocinadas y suplementos nutricionales, la construcción de letrinas, la distribución de kits de higiene y el suministro de agua.
Sin embargo, los continuos ataques y las restricciones israelíes a la ayuda significan que no llega suficiente ayuda a las personas necesitadas. Islamic Relief sigue pidiendo un alto el fuego inmediato y la apertura permanente de todos los cruces hacia Gaza.