Este World Humanitarian Day destaca el costo humano inmediato de la crisis climática y pide a los líderes mundiales que tomen medidas significativas por las personas más vulnerables del mundo. Con el tema #TheHumanRace, el enfoque está centrado en la carrera contra el tiempo y la necesidad de que todos trabajemos juntos para poder llegar a la línea de meta, sin dejar a nadie atrás.
Sharmin Ruba trabaja en Bangladés para Islamic Relief y nos informa sobre los efectos que tiene el cambio climático en el país y cuál es nuestro trabajo para llegar a las personas más vulnerables.
Sharmin Ruba trabaja para Islamic Relief en Bangladés
A nivel mundial, la escala de la migración a causa del clima ya está aumentando, debido a que las personas huyen de los efectos devastadores que tiene el cambio climático. Se prevé que las sequías, las malas cosechas, la erosión y el aumento del nivel del mar impulsarán una aceleración en el número de personas que se verán forzadas a abandonar sus hogares, con predicciones de que las amenazas ecológicas y los conflictos armados podrían haber desplazado a más de 1.000 millones de personas para 2050. Cerca del ecuador, partes de la Tierra podrían calentarse demasiado para poder ser habitables para los humanos.
Bangladesh no es ajeno a los desastres y las fuertes tormentas, especialmente en la temporada de monzones, pero la frecuencia e intensidad de las condiciones meteorológicas extremas, como los ciclones, está empeorando, y la repetición de los desastres da poco tiempo de margen para poder recuperarse de eventos anteriores.
En 2020, un tercio de Bangladés se encontraba bajo el agua, debido a una temporada de monzones anormalmente fuerte intensificada por el aumento de las temperaturas de la superficie del mar. Además, el país está experimentando regularmente ciclones devastadores, inundaciones y la erosión de las riberas de los ríos.
Bangladesh se enfrenta a emergencias humanitarias complejas. Desde 2017, más de 1 millón de Nacionales Rohingya Desplazados Forzosos de Myanmar (FDMN) han huido a Bangladesh y viven en el asentamiento de refugiados más grande del mundo, en Cox’s Bazar.
En febrero visité Cox’s Bazar para una reunión oficial después de un largo paréntesis. Cox’s Bazar siempre me resultó muy fascinante y lo visitaba cada año, disfrutando de la belleza escénica de la playa marina más larga del mundo que se inclina suavemente hacia abajo en la Bahía de Bengala.
Solía ir por el paseo marítimo, y no podía evitar quedar hipnotizada por lo que me rodeaba: las carreteras y la icónica playa en un lado y exuberantes colinas verdes en el otro, formando un hermoso contraste.
No había estado desde 2012, y a cualquiera que fuera allí ahora se le podría perdonar el hecho de pensar que el Cox’s Bazar de hace 9 años y el Cox’s Bazar de hoy son lugares totalmente diferentes. Cox’s Bazar fue hogar de importantes áreas de bosque protegido y un importante hábitat de vida silvestre. Los árboles que dieron a las colinas su hermoso color verde han sido talados para proporcionar combustible y muchas de las colinas han sido demolidas.
El cambio climático está ocasionando que los ciclones e inundaciones más frecuentes e intensos amenazan tanto a los bangladesíes como a los refugiados FDMN, entre los que se encuentran las personas más vulnerables del mundo. Los refugiados, que ya viven con una incertidumbre constante, se enfrentan a inundaciones y deslizamientos de tierra que destruyen sus refugios y los desplazan una vez más.
Bhashan Char, edificio construido específicamente para hospedar a Nacionales Rohingya Desplazados Forzosos de Myanmar (FDMN)
Para aliviar la aglomeración, el Gobierno de Bangladesh está reubicando a 100.000 refugiados en una isla en la Bahía de Bengala, a 37 km del continente y a 6 km de Sandwip. Ha dado la oportunidad de construir mejores refugios resistentes al clima. El gobierno ha construido 1.440 edificios, incluyendo refugios para ciclones. Las casas han sido construidas a cuatro pies sobre el suelo para mayor protección.
Bhashan Char está atravesado por varios canales pequeños y hay un bosque. No tuve la oportunidad de visitar la isla, aunque Islamic Relief ha garantizado la seguridad alimentaria y los artículos de supervivencia para las personas reubicadas. Islamic Relief también se está encargando de sus necesidades de combustible, proporcionándoles 5.400 cilindros de gas GLP.
Dar a las familias una fuente de combustible significa que no hay necesidad de talar árboles, lo que ayuda a abordar la deforestación.
Islamic Relief también ha tenido varias reuniones con funcionarios del gobierno para llevar a cabo un estudio de viabilidad sobre las oportunidades de sustento aquí. Esto creará actividades de generación ingresos para las personas desplazadas, que podrían incluir plantaciones de árboles, huertos, aves de corral y ganado, pesca y sastrería. Al cultivar verduras, la isla se volverá más verde, lo que eventualmente será una barrera natural como Sundarban.
En la carrera contra la crisis climática, no podemos dejar a nadie atrás, y creo que nuestro trabajo ayudará a mejorar significativamente la vida de las personas.
El World Humanitarian Day es una campaña de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCAH) y asociados humanitarios.
Con el tema de este año de The Human Race se expone un desafío global para la acción climática en solidaridad con las personas que más lo necesitan. Para obtener más información, entra en: https://2021.worldhumanitarianday.org
Islamic Relief trabaja en la primera línea contra el cambio climático, proporcionando apoyo que salva y cambia vidas vidas en las comunidades vulnerables, y lleva a cabo campañas para iniciar acciones audaces que aborden la emergencia climática. Este World Humanitarian Day, rendimos homenaje a nuestros compañeros y seguidores, quienes hacen posible esta labor. Con tu apoyo, podemos hacer más: por favor dona hoy.